El Poder Ejecutivo uruguayo aprobó, a mediados de noviembre, un decreto que aplica una tasa del 12 % a la importación de harina de trigo argentina. La medida fue justificada por los medios uruguayos en los subsidios que reciben los molinos argentinos, al tener acceso a un trigo más barato producto de los impuestos que se le aplican a las exportaciones. Además, representantes de la Cámara Industrial de Alimentos se reunieron con técnicos de la Asesoría de Política Comercial del Ministerio de Economía para pedir que se eleven al 18 % los aranceles a la importación de los derivados de la harina, tales como galletitas y fideos. A comienzos de 2007 Uruguay impuso una tasa del 10 % que hoy es considerada insuficiente por los industriales.
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URUGUAY – ARANCELES A LA HARINA DE TRIGO
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