Si bien los Ministros expresan un fuerte apoyo a las negociaciones multilaterales, aún resta mucho por hacer. Se plantea distinguir entre temas con potencialidad de alcanzar resultados en la XICM y aquellos que requieran programas de trabajo post-Buenos Aires.
Reunión de Marrakech
Los días 9 y 10 de octubre se llevó a cabo en Marrakech, Marruecos, una reunión informal de Ministros preparatoria para la XI Conferencia Ministerial (XICM) de la Organización Mundial de Comercio (OMC), que tendrá lugar en Buenos Aires en diciembre próximo. Dicho encuentro fue co-presidido por el Ministro de Industria, Inversiones, Comercio y Economía Digital de Marruecos, Moulay Hafid El-Alami y la Ministra Susana Malcorra, Presidente de la XICM, y contó con la participación de 30 delegaciones.
En relación al encuentro, el Director General de la OMC, Roberto Azevêdo, sostuvo que si bien el fue positivo con un fuerte apoyo de los Ministros a una Conferencia exitosa, aún resta traducir ese apoyo en acciones concretas en Ginebra. Convocó a los Ministros a trabajar más activa y participativamente en los próximos días si se quiere obtener un resultado exitoso en Buenos Aires, entendiendo que deberían “trabajar para garantizar que tengamos el equilibrio adecuado al evaluar los problemas que creemos que podemos avanzar en la XICM y aquellos en los que se requerirá más trabajo«.
Al respecto, la Presidente Malcorra indicó a los Miembros de la OMC “que deben decidir muy pronto qué cuestiones se pueden resolver en la conferencia y cuáles requieren más trabajo”. Mencionó que “hay vida después de Buenos Aires.”. A sabiendas que existen diferencias importantes entre los Miembros en algunas cuestiones, propuso distinguir entre aquellas maduras para alcanzar una Decisión en la XICM y aquellas que están aún en un estadio incipiente de discusiones o lejos de acercar posiciones, para las cuales se podría acordar un proceso para avanzar más allá de Buenos Aires.
En respuesta a qué acuerdo podría alcanzarse en la Conferencia, indicó que a su criterio la reducción de los subsidios a la pesca era el acuerdo más probable aunque admitió que existen diferencias en cuanto al nivel de ambición alcanzable en la XICM. Por ello, hizo hincapié en que podrían acordarse algunos elementos este año mientras que otros podrían abordarse en la próxima CM en 2019.
En particular, mencionó que la agricultura permanece entre las cuestiones más importantes y desafiantes que enfrentan los Miembros, y se refirió específicamente a la constitución de existencias públicas con fines de seguridad alimentaria, la reducción de los subsidios internos que distorsionan el comercio y la reforma del comercio del algodón como elementos sobre los cuales los miembros deben encontrar un terreno común. Más detalles sobre las propuestas que se encuentran sobre la mesa en materia de agricultura se encuentran en el Boletín Nº 164.
Mencionó también algunos temas sobre los que podría establecerse un programa de trabajo post-XICM, como ser: comercio de servicios, comercio electrónico y facilitación de una mayor participación de las pequeñas empresas y las mujeres empresarias en el comercio mundial. Del encuentro también participó el Ministro de Producción, Francisco Cabrera, quien convocó a impulsar la inserción internacional de las PyMEs, fortalecer el sector de servicios basados en el conocimiento y trabajar en la facilitación de inversiones en el país.
No más subsidios a la exportación para la UE
En virtud de la Decisión de Nairobi de 2015, los miembros de la OMC acordaron abolir las subvenciones a las exportaciones agrícolas y establecer disciplinas sobre las medidas de exportación con efecto equivalente, nivelando el campo de juego para los agricultores de todo el mundo.
En este sentido, la UE presentó la notificación a la OMC por la cual elimina la posibilidad de aplicar subvenciones a las exportaciones de productos agropecuarios. El pasado 17 de octubre la UE ha presentado una modificación a su lista relativa a mercancías para sus 28 Estados Miembros, incorporando la aplicación de la Decisión antedicha, por la que los Miembros de la OMC han decidido eliminar las subvenciones a la exportación. Formalmente, estos cambios entrarán en vigencia en tres meses si ningún miembro plantea ninguna objeción durante ese período.
De esta forma, la UE se convirtió en el segundo miembro de la OMC en hacerlo, después que Australia hiciera lo propio en mayo de 2017. Canadá, otro usuario de este tipo de medidas, ha informado que actualmente está llevando adelante los procedimientos internos necesarios para implementar la Decisión de 2015.