La política estadounidense bajo la lupa. Entre los pasados 18 y 20 de diciembre de 2012 se llevó a cabo el undécimo examen de las políticas y prácticas comerciales de Estados Unidos, sobre la base de dos informes presentados por la Secretaría de la OMC y el Gobierno de ese país. Las preocupaciones de los Miembros giraron en torno a la posible salida del “precipicio fiscal” estadounidense, al futuro de la política agrícola y al nivel de compromiso que Washington tendrá en las negociaciones comerciales multilaterales. En su informe, la Secretaría destacó que la economía de EE.UU. ha experimentado una recuperación lenta, pero constante. El comercio de bienes y servicios ha vuelto a alcanzar cifras sin precedentes que sobrepasan los niveles récord de 2008. Para esto se han puesto en marcha varias políticas destinadas a fomentar las exportaciones y las inversiones. En cuanto a las políticas comerciales, desde el anterior informe de 2010 se aprobaron los acuerdos de libre comercio con Corea del Sur, Panamá y Colombia, y se prorrogaron el Sistema Generalizado de Preferencias y la Ley de Preferencias Comerciales para los Países Andinos. Además, se está trabajando para concluir el acuerdo comercial regional de Asociación Transpacífica. El comercio preferencial representó en 2011 el 20,1% de las importaciones estadounidenses. La política de importaciones se ha mantenido casi sin cambios. Particularmente, la aplicación de las complejas leyes y reglamentaciones sobre normas de origen y marcas sigue siendo excesivamente engorrosa. La protección arancelaria continua siendo relativamente baja, aunque existen picos arancelarios en sectores tales como calzado, cuero, textiles y prendas de vestir, así como en los productos agrícolas, que también están sujetos a un número considerable de aranceles no ad valorem. En lo que respecta a las exportaciones, se ha puesto en marcha la Iniciativa Nacional de Exportación, destinada a mejorar la promoción del comercio e impulsar el crecimiento. En materia de agricultura, la OMC destaca que en 2011 el valor total de la producción estadounidense ascendió a 372.000 millones de dólares, y el de las exportaciones a 144.800 millones; aunque el sector representa menos del 1% del PIB. Si bien han aumentado considerablemente las exportaciones de carne bovina, los principales productos de exportación siguen siendo soja, maíz, trigo y algodón. El promedio de los aranceles aplicados a las importaciones de productos agropecuarios fue en 2012 del 8,5%, mientras que para el resto de los productos este promedio alcanzó el 4%. Los tipos arancelarios van de 0 a 350%. Los aranceles más altos corresponden tabaco, azúcar, maníes y lácteos, seguidos de carne bovina, algodón y determinados productos hortícolas. EE.UU. ha notificado 44 contingentes arancelarios, en su mayor parte de productos lácteos, azúcar y algodón. La Corporación de Créditos para Productos Básicos (CCC) financia varios programas de ayuda para las exportaciones de productos agropecuarios, como el Programa de Garantía de los Créditos a la Exportación (GSM 102), el Programa de Garantía de Instalaciones y el Programa de Acceso a los Mercados, entre otros. En el marco del Programa de Incentivos para la Exportación de Productos Lácteos se subvencionaron en 2009 exportaciones de manteca y queso por 2,3 millones de dólares. Respecto de los subsidios a la producción, la mayor parte de la ayuda se ha prestado por medio de pagos directos vinculados a superficie y rendimientos históricos (en promedio 5.000 millones de dólares anuales). Los pagos realizados a través de programas de sostenimientos de precios han descendido significativamente, debido a que los precios de mercado de la mayoría de los productos abarcados han superado los precios indicativos. Los pagos contracíclicos descendieron de 4.800 millones de dólares en 2005 a 17 millones en 2010, destinados básicamente a productores de maní y algodón. Los desembolsos en concepto de primas de complemento y préstamos para la comercialización ascendieron a 1 millón de dólares en 2011 (sólo lana). El programa de sostenimiento de la renta ACRE sigue funcionando, aunque sólo se enroló en 2011 el 13,8% de las superficies de base. Como contrapartida, aumentaron notoriamente las subvenciones otorgadas a través del Programa de Seguro para las Cosechas. Estas alcanzaron los 4.700 millones de dólares en 2010, y se estima que fueron de unos 7.200 millones en 2011, cubriendo alrededor del 80% de la superficie cultivada. En función de estas tendencias, debe destacarse que aunque la ayuda a los productores agropecuarios en EE.UU. registra un descenso, ello no se debe a una modificación de las políticas agrícolas sino al aumento de los precios internacionales, que ha hecho que se reduzcan los pagos vinculados a los precios y los ingresos. Esas políticas siguen ofreciendo a los productores una extensa red de seguridad que los protege de variaciones en precios y rendimientos y los incentiva a aumentar su producción. Finalmente, la Administración Obama manifestó que está determinada a preservar y potenciar la función indispensable de la OMC. Se comprometió a impulsar las negociaciones sobre facilitación del comercio y sobre distintas cuestiones relacionadas con el desarrollo, así como a estudiar nuevos enfoques para la conclusión de la Ronda Doha. Estas declaraciones fueron bienvenidas por los demás Miembros de la OMC. A fin de complementar este enfoque, EE.UU. señaló que trabajará para asegurar la rápida entrada en vigor y la plena aplicación de sus acuerdos comerciales, y respaldará las iniciativas regionales y bilaterales en curso, que incluyan estándares laborales y medioambientales más estrictos. Leer en pdf »
EE.UU. – EXAMEN DE POLÍTICAS COMERCIALES
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