Rusia y Ucrania en la disyuntiva. El vice primer ministro de Rusia, Arkadi Dvorkovitch, buscó llevar tranquilidad frente a los temores por un débil panorama para los cultivos de granos de invierno del país. Señaló que para los granos de invierno, el área sembrada es más grande que el año pasado, lo que da fundamentos para esperar una buena cosecha. Sin embargo, el Ministerio de Agricultura previamente recortó su pronóstico para el área sembrada de invierno a 15,9 millones de hectáreas debido al clima desfavorable. Rusia, que históricamente ha sido uno de los mayores exportadores mundiales de trigo, se ha visto afectada por una sequía este año, lo que llevó a los precios domésticos del trigo a niveles récord y generó temores sobre un déficit en primavera. Las autoridades se encargaron de ratificar que no existían riesgos de una escasez de granos a nivel doméstico y que los precios se van a estabilizar en las próximas semanas gracias a las ventas de las reservas de intervención del Gobierno. Según sus estimaciones, las ventas de intervención serán del orden de 1,2 millones de toneladas y se harán de aquí a fin de año, quedando en las reservas aproximadamente unas 3 millones de toneladas. De esta manera, según declaró el viceministro de Agricultura del país, Ilya Shestakov, las exportaciones de granos de Rusia alcanzarían a 15,5 millones de toneladas en la campaña de cultivo 2012/2013, de las cuales ya fueron vendidas 11 millones de toneladas. Agregó que el Ministerio llegará al ciclo 2013/2014 con existencias remanentes de granos en niveles críticamente bajos. Este año prevé una cosecha de cereales de 71,7 millones de toneladas, contra 94,2 millones en 2011. A pesar de estos datos, Rusia no ha impuesto de momento un embargo a sus exportaciones, a diferencia de lo que hizo en 2010, cuando el país se vio afectado por una sequía sin precedentes. Diferente es el caso de Ucrania, cuyo Ministerio de Agricultura habría dado marcha atrás sobre una promesa de no imponer restricciones a las exportaciones de trigo antes del 1º de diciembre y fijaría límites en unas semanas, según indicaron operadores del mercado de granos. Vale recordar que, en agosto, el Ministerio y exportadores firmaron un memorándum que limitaba las exportaciones de trigo a 4 millones de toneladas, elevándolo luego hasta los 5,5 millones, con la promesa de no imponer restricciones hasta el 1º de diciembre. Posteriormente, surgió una versión enmendada del documento, donde el volumen máximo seguía igual, pero se eliminó la fecha del 1º de diciembre. Según datos del organismo, el país exportó 4,78 millones de toneladas de trigo hasta el lunes pasado y se habrían negociado otras 617.000 toneladas para envíos en el futuro cercano. En tanto, el ministro de Agricultura, Mykola Prysyazhnyuk, indicó que la máxima prioridad es cuidar la seguridad alimentaria del país. Por su parte, los operadores de granos expresaron que esperan que el Gobierno introduzca limitaciones a las exportaciones de trigo en diciembre, aunque temen que en lugar de una veda oficial, se opte por restricciones informales, las cuales podrían favorecer a algunas compañías privilegiadas. Analistas y operadores coinciden en que el Gobierno necesita limitar las ventas debido a que las existencias locales de trigo no son lo suficiente elevadas para garantizar el actual alto ritmo de exportaciones. Debe recordarse que en el ciclo 2010/11, el país aplicó barreras informales a las exportaciones de trigo tras una decepcionante cosecha.
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RESTRICCIONES A LAS EXPORTACIONES
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