El decimotercer informe de la OMC sobre vigilancia de las medidas comerciales adoptadas por los países Miembros del G-20, pone de manifiesto una ligera desaceleración en la aplicación de nuevas medidas restrictivas del comercio. Subrayando que aún no está claro que esta tendencia vaya a continuar, el documento insta a los países a ejercer una vigilancia constante, así como a avanzar con mayor determinación hacia la eliminación de las restricciones al comercio vigentes en la actualidad.
En el período comprendido entre mediados de octubre de 2014 y mayo de 2015 las economías del G-20 impusieron 119 medidas restrictivas del comercio, siendo Argentina responsable de 12 de ellas. Si no se toman en cuenta las medidas comerciales correctivas, se han adoptado más medidas de liberalización de las importaciones que restrictivas desde finales de 2013.
Esta evolución confirma que, en general, los países han actuado con un cierto grado de moderación al introducir nuevas medidas proteccionistas. No obstante, es importante señalar que debido a la lentitud con que se eliminan las restricciones anteriores, el conjunto global de medidas restrictivas sigue creciendo. En total, el informe muestra que solo se han suprimido 329 de las 1.360 restricciones registradas desde octubre de 2008. Esta situación no es compatible con la promesa que hizo el G-20 de dejar sin efecto las medidas proteccionistas.
El contexto económico internacional confirma la necesidad de ejercer una vigilancia y una acción constantes. Desde el último informe de monitoreo, el comercio se ralentizó y la recuperación económica ha sido dispar, generando incentivos a la imposición de trabas a los flujos comerciales.
En un documento relacionado, la OCDE sugiere que las políticas discriminatorias en materia de contratación pública son cada vez más populares, y podrían afectar a contratos por valor de 423.000 millones de dólares en las economías que las aplican.
También se pone de relieve que en el período de examen las economías del G-20 aplicaron 48 nuevas medidas de apoyo económico general, la mayoría de las cuales se aplican al sector manufacturero y a la agricultura por medio de diversos planes de incentivos, en muchos casos relacionados con las exportaciones.
Por otro lado, recientemente se han registrado novedades notables en materia de servicios. Entre ellas figura la reforma del sector de los seguros y las pensiones y la relajación de las normas sobre inversión extranjera en los sectores de la construcción y el transporte por ferrocarril de la India, así como la eliminación de las restricciones a la inversión extranjera en varios sectores de servicios de China.
Como conclusión, se destaca que aunque el conjunto de medidas restrictivas del comercio ha crecido, la respuesta global a la crisis de 2008 ha sido moderada en comparación con las crisis anteriores. Por tanto, el sistema multilateral de comercio ha resultado eficaz como seguro frente al proteccionismo. Sin embargo, este sistema debe contribuir más al crecimiento económico, la recuperación sostenible y el desarrollo. En este sentido, los Miembros deberían tener presente la función de la OMC en la creación de un entorno comercial estable, previsible y transparente mientras se preparan para la Décima Conferencia Ministerial. El avance decisivo en la eliminación del resto de medidas restrictivas del comercio combinado con una mayor liberalización del comercio multilateral constituiría una respuesta de política enérgica.