El renovado impulso negociador del Mercosur contrasta con el incremento de medidas proteccionistas resultantes de la guerra comercial. En un escenario incierto, el Mercosur envía señales de integración.
EFTA
Del 2 al 6 de julio se desarrolló la IV Ronda de Negociaciones entre el Mercosur y la Asociación Europea de Libre Comercio (AELC o EFTA por sus siglas en inglés), formada por Islandia, Liechtenstein, Noruega y Suiza. En tal ocasión, se reunieron los grupos de trabajo técnicos. Según informaron desde la Cancillería argentina, se concretó el intercambio de ofertas de acceso a mercado en Comercio de Bienes, Comercio de Servicios y Compras Gubernamentales. Asimismo, se consensuaron líneas de acción y el cronograma de reuniones a futuro, que se celebrarán: la V Ronda de Negociaciones en Buenos Aires en octubre y la siguiente en Ginebra, a fines de noviembre. De cara al próximo encuentro se espera avanzar en propuestas de mejoras de las ofertas intercambiadas.
Para más información sobre este bloque y negociación, se puede consultar el informe de la Fundación INAI Análisis Preliminar de Impacto de un Acuerdo de Libre Comercio entre Mercosur y EFTA para el sector agroindustrial, como también el Informe de Acceso a Mercados de EFTA.
UE-CELAC
Los días 16 y 17 de julio se llevó a cabo la II Reunión de Ministros de Relaciones Exteriores de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) y la Unión Europea (UE) en Bruselas. Entre los principales temas abordados, se encuentran: el multilateralismo y el fortalecimiento de la cooperación en los foros globales; la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible; economías sustentables e inclusivas, comercio, inversiones y productividad. Según el gobierno argentino, este encuentro se enmarca en el diálogo de concertación política entre ambas regiones, “que ha permitido estructurar una agenda común de intereses en lo político, así como de acciones en materia de cooperación”.
Alianza del Pacífico
En el marco de la XIII Cumbre de la Alianza del Pacífico (AP), bloque constituido por Chile, Colombia, México y Perú, el Mercosur y la AP celebraron un nuevo encuentro para afianzar sus relaciones comerciales, en México. En tal ocasión, se firmó una Declaración Conjunta que incluyó un plan de acción en el que se plantea la posibilidad de suscribir un acuerdo comercial entre ambos bloques. Cabe destacar, que en caso de avanzar en esta negociación, un tema fundamental que creemos debe formar parte del potencial acuerdo es la “franja de precios” que aplican ciertos países de la AP y afecta a varios productos de interés para el sector, a saber: maíz, poroto y aceite de soja, cebada, azúcar, leche entera, carne de cerdo y trozos de pollo, entre otros.
Según indicaron desde la AP, en el plan de acción se identificaron asimismo las siguientes áreas de trabajo conjunto: eliminación de barreras no arancelarias, cooperación regulatoria, promoción comercial y pymes, facilitación del comercio, entre otros. Cabe recordar que en una reunión ministerial de ambos bloques llevada a cabo en abril de 2017, habían convenido instruir a un Grupo de Alto Nivel a reunirse periódicamente, y acordaron una hoja de ruta para avanzar en la profundización del vínculo inter-bloques (ver más detalles sobre tal reunión en Señales de integración latinoamericana).
Singapur
El 23 de julio, en el marco también de la XIII Cumbre de la AP, se celebró el lanzamiento formal de las negociaciones entre el Mercosur y Singapur, en Puerto Vallarta, México, tras la conclusión exitosa del diálogo exploratorio. Constituye la primera negociación de este tipo con un país del Sudeste Asiático. En ocasión del encuentro, se elaboró un documento conjunto donde se establecen los términos de referencia para la conducción de las negociaciones y se define que la primera ronda de negociaciones comerciales tendría lugar el segundo semestre de 2018.
Singapur representa un mercado de 6 millones de personas con el mayor PBI per cápita del Sudeste Asiático. Constituye una puerta de entrada a dicha región, actuando como inversor y distribuidor. Tiene una alta dependencia de la importación de productos alimenticios y es abastecido principalmente por Malasia, Francia, Indonesia, Estados Unidos y China (proveen el 54% de sus compras mundiales), ubicándose Argentina en el puesto 30º (0,3%). Respecto a la política comercial, es uno de los mercados más abiertos del mundo: el 99,8% de las líneas arancelarias están exentas de impuesto, estando solo gravadas las bebidas y tabaco.
Las exportaciones agroindustriales argentinas a Singapur rondaron los 34 millones de dólares anuales durante el último trienio. Entre los principales productos exportados se destacan: carne y despojos comestibles de gallo o gallina congelados (18%), merluza (17%), gelatinas y sus derivados, camarones y langostinos, vino de uvas frescas y peras, entre otros. Para conocer más acerca de este mercado, se puede consultar el Informe de Acceso a Mercados de Singapur elaborado por la Fundación INAI.