EE.UU. impuso derechos antidumping provisionales al biodiesel argentino, complicando aún más el panorama para dicho producto que ya se veía afectado por la aplicación de derechos compensatorios.
El pasado 23 de octubre, en el marco de la investigación por supuestos subsidios, se conocieron nuevas medidas que afectan al biodiesel argentino en su ingreso al mercado estadounidense. Se trata de la aplicación de derechos antidumping provisionales, de entre el 54,36% y el 70,05%, dependiendo de la empresa. Para el caso de Indonesia, país también investigado, los aranceles fueron de 50,71%.

Fuente: U.S. Census Bureau, accessed through Global Trade Atlas. (HTSUS 3826.00.1000 and 3826.00.3000)
A esto debe sumarse la aplicación de los derechos provisionales compensatorios aplicados en agosto, que fluctúan entre el 50,29% y el 64,17%, también de acuerdo a cada empresa.
La determinación definitiva en materia de derechos antidumping está prevista para los primeros días de enero, donde se puede dar por concluida la investigación sin aplicar medidas o por el contrario, transformar en definitivos los derechos compensatorios por un plazo de hasta 5 años.
Debe recordarse que todo inició en marzo pasado, cuando la National Biodiésel Board (NBB) denunció al biodiésel argentino por supuesto dumping y supuestos subsidios, lo que dio inicio a dos investigaciones paralelas y la correspondiente aplicación de medidas en ambos casos.
Desde el Gobierno argentino se están llevando adelante negociaciones para lograr un acuerdo de suspensión que deje sin efecto ambas investigaciones. En la actualidad se está evaluando definir cantidades a un valor determinado, aunque no se precisaron los números.
Hacia el cierre de esta edición, una comitiva argentina integrada por Horacio Reyser, Secretario de Relaciones Económicas Internacionales, Miguel Braun, Secretario de Comercio, y Shunko Rojas, Subsecretario de Comercio Exterior, se reunirían con Wilbur Ross, Secretario de Comercio de EE.UU., con el objetivo de avanzar en la propuesta.
Si bien se ha señalado la predisposición de ambos gobiernos a alcanzar un acuerdo, la otra posibilidad es plantear, una vez concluida la investigación, la controversia ante el Órgano de Solución de Diferencias de la OMC. Pero se trata de una alternativa que lleva tiempo, como se ha visto en el caso con la Unión Europea y podría complicar aún más las relaciones bilaterales.